Gaza, Junio 2024 - Las tropas del Batallón 202 de Paracaidistas Hetz Haredi han vivido 36 horas que quedarán grabadas en la historia militar israelí y en la memoria de quienes defienden su país con devoción y sacrificio.
En un breve pero intenso período, esta unidad ultraortodoxa ha enfrentado desafíos devastadores que pondrían a prueba a cualquier soldado. Primero, perdieron a su venerado comandante, el Mayor Gal Shabbat, abatido por disparos terroristas.
Poco después, en una misión de reconocimiento, descubrieron los cuerpos de cuatro rehenes en un túnel, demostrando una vez más su coraje y pericia. La tragedia alcanzó su punto álgido cuando cinco soldados murieron en un incidente de fuego amigo.
El Sacrificio del Mayor Gal Shabbat
La mañana del 15 de junio, durante una operación en Jabaliya, el Mayor Gal Shabbat lideraba a sus hombres en una misión crítica. De repente, un terrorista abrió fuego, hiriéndolo gravemente. Shabbat sucumbió a sus heridas tres días después, dejando un vacío profundo en la compañía.
Un Descubrimiento Macabro
Horas después de perder a su comandante, la compañía, bajo el liderazgo provisional del Capitán Roy Beit Yaakov, se encontraba rastreando un complejo de túneles. Su intuición y entrenamiento los llevaron a encontrar los cuerpos de cuatro rehenes, ocultos en un pozo de diez metros. Este hallazgo, aunque trágico, fue un testimonio del compromiso y la habilidad de estos soldados.
El Incidente de Fuego Amigo
La noche siguiente, en medio de la confusión y el caos del combate, dos tanques del 82.º Batallón Blindado, operando junto a los paracaidistas, confundieron un edificio ocupado por la unidad Hetz Haredi con una amenaza terrorista y abrieron fuego. Las explosiones resultantes mataron a cinco soldados, incluyendo al Capitán Roy Beit Yaakov.
Continuando la Misión
A pesar de estas pérdidas devastadoras, la compañía, ahora bajo el mando del Capitán Shlomo Cohen, no flaqueó. Cohen, un jabadnik de Safed, asumió el liderazgo con determinación y dirigió a sus hombres en una nueva misión al día siguiente.
Continuando la Misión
A pesar de estas pérdidas devastadoras, la compañía, ahora bajo el mando del Capitán Shlomo Cohen, no flaqueó. Cohen, un jabadnik de Safed, asumió el liderazgo con determinación y dirigió a sus hombres en una nueva misión al día siguiente.
"No creo que ninguna unidad militar haya experimentado tal secuencia de eventos en tan poco tiempo, pero salimos más fuertes", afirmó Cohen.
Resiliencia y Fe
Las tropas de la compañía Hetz Haredi han demostrado una resiliencia impresionante. En medio del combate, encuentran tiempo para estudiar la Torá y observar sus prácticas religiosas."Podemos celebrar sesiones de estudio de Torá incluso en Gaza, y tenemos soldados que recibieron materiales de estudio para llevarlos a la Franja de Gaza y encontraron tiempo para ello.
Por supuesto, también realizamos servicios de oración", comentó el comandante Cohen. Además, la unidad cuenta con soldados solitarios de Estados Unidos y Francia, algunos de origen religioso o haredí, que han encontrado en esta compañía un lugar donde pueden mantener su fe mientras sirven.
Un Cambio en la Percepción
En medio del debate sobre la exención de los haredim del servicio militar, las acciones de la compañía Hetz Haredi han capturado la atención del público israelí.Estos soldados ultraortodoxos han mostrado que es posible mantener su estilo de vida religioso mientras sirven en las unidades más desafiantes del ejército.
"La combinación de la vida haredí con el servicio de combate es absolutamente posible", concluyó Ben Ami. "Esta guerra ha demostrado que podemos contribuir significativamente a la defensa de nuestro país sin renunciar a nuestras creencias".
"La combinación de la vida haredí con el servicio de combate es absolutamente posible", concluyó Ben Ami. "Esta guerra ha demostrado que podemos contribuir significativamente a la defensa de nuestro país sin renunciar a nuestras creencias".
Hacia el Futuro
Mientras se preparan para su próxima misión en Gaza, los soldados de Hetz Haredi continúan con la convicción de que su lucha es un verdadero acto de devoción y patriotismo. Su valentía y sacrificio son un testimonio de su compromiso con Israel y con su fe.Fuente: Ynet
