La Corte Suprema dictamina que no existe un marco legal que permita la diferenciación entre estudiantes de ieshivá y otras poblaciones.
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| Audiencia en la Corte SupremaYonatan Sindel/Flash90 |
Jerusalén, 25 de junio de 2024 - En un giro histórico que redefinirá el panorama social y de defensa de Israel, la Corte Suprema ha dictaminado este martes que los estudiantes de ieshivá, tradicionalmente exentos del servicio militar obligatorio, ahora deberán cumplir con sus deberes castrenses al igual que cualquier otro ciudadano israelí.
Esta decisión, tomada de forma unánime por los nueve jueces del alto tribunal, marca un cambio radical en la política de exenciones que ha beneficiado a la comunidad ultraortodoxa durante décadas y enciende las alarmas en algunos sectores, mientras que otros la celebran como un paso hacia la igualdad.
Igualdad ante la ley: el fundamento del fallo
La Corte Suprema basó su decisión en la ausencia de una ley específica que exima a los estudiantes de ieshivá del servicio militar. Al no existir dicha ley, los magistrados determinaron que no hay base legal para diferenciarlos del resto de la población sujeta a reclutamiento.
Este fallo histórico llega tras un intenso debate y controversia, impulsado por una petición presentada por grupos de justicia social que exigían el fin de la exención para los estudiantes de ieshivá. Argumentaban que esta práctica era discriminatoria e injusta, creando una brecha significativa en la sociedad israelí.
Reacciones encontradas: entre el beneplácito y la desaprobación
Como era de esperar, la decisión ha generado reacciones encontradas. Por un lado, líderes de la oposición y grupos defensores de la igualdad han celebrado el fallo, considerándolo un paso crucial hacia una sociedad israelí más justa e igualitaria. Ven en esta medida una oportunidad para fortalecer la cohesión social y reducir las brechas existentes.
Por otro lado, la comunidad ultraortodoxa ha expresado su profunda desaprobación. Muchos líderes religiosos han calificado la decisión como un ataque a sus valores y tradiciones, advirtiendo incluso de posibles disturbios civiles y una mayor división social. Argumentan que el estudio de la Torá es un servicio tan importante para el país como el servicio militar.
Un futuro incierto: interrogantes y desafíos
Las repercusiones a largo plazo de este fallo histórico aún no están claras. Queda por ver cómo implementará el gobierno el nuevo mandato de reclutamiento y cómo reaccionará la comunidad ultraortodoxa ante esta nueva realidad. Se vislumbran desafíos logísticos y sociales para su implementación efectiva.
En resumen:
- Estudiantes de ieshivá ahora estarán sujetos al servicio militar obligatorio en Israel.
- La decisión se basa en la falta de una ley que exima a este grupo de la obligación.
- El fallo ha sido recibido con elogios por algunos y condenado por otros.
- Las consecuencias a largo plazo y su implementación aún generan interrogantes.
